Hotel Rural Casa Amarilla

La residencia fue construida en el siglo XVIII para alojar a un experto británico que había llegado para supervisar la fábrica de caña de azúcar de la familia Cólogan. Por esta razón, su diseño colonial inglés evoca las viviendas africanas que estaban en posesión de las colonias británicas. Posteriormente, la propiedad se convirtió en una plantación de plátanos y la vivienda era utilizada por la familia como lugar de veraneo. Actualmente, transformada en un hotel rural llamado Casa Amarilla, sigue manteniendo su entorno tranquilo rodeado de una exuberante vegetación subtropical. El hotel rural Casa Amarilla dispone de siete habitaciones dobles con baño. La habitación número 6 se encuentra en un edificio externo y cuenta también con un pequeño salón y televisión. La casa cuenta con dos comedores: uno con una mesa grande tradicional para 8 a 12 personas, que también puede utilizarse como sala de conferencias y reuniones para grupos pequeños. El otro comedor, con vistas a una exuberante vegetación, cuenta con seis mesas para cuatro personas cada una, donde se sirven desayunos tipo buffet. Además, hay un salón con televisión, una terraza rodeada de vegetación, ideal para relajarse y leer. La propiedad incluye una piscina con vestuarios y duchas. En la azotea, hay un solárium y un cuarto de palos de golf a disposición de los huéspedes.